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La Comisión Europea ha fijado el recorte lineal que se aplicará a las ayudas directas de la PAC 2019 para constituir la reserva de crisis agrícola de 2020. Será del 1,44 %, que se aplicará a los pagos destinados a todos los beneficiarios, aunque, como en años anteriores, quedan exentos los importes inferiores a 2.000 euros. En 2018 el recorte se fijó en 1,42%.

La normativa comunitaria vigente establece que, en cada ejercicio presupuestario, debe crearse una reserva destinada a facilitar ayuda complementaria al sector agrario en caso de crisis importantes que afecten a la producción o distribución de productos agrícolas mediante la aplicación, a principios de cada año, de una reducción de los pagos directos a través del mecanismo de disciplina financiera.

El importe de la reserva para crisis en el sector agrario incluido en el proyecto de presupuesto de 2020 de la Comisión Europea asciende a 478 millones de euros. Para cubrirlo se aplicará un recorte del 1,44% a los pagos directos del presente ejercicio 2019, del que están exentos los importes inferiores a 2.000 euros.

La reglamentación establece que si esa reserva de crisis no se utiliza en el ejercicio para el que se ha constituido, se devuelven los importes retenidos a los beneficiarios. Desde que entró en vigor este mecanismo nunca se ha recurrido a la reserva y, en consecuencia, se han reembolsado las cantidades deducidas.

La situación podría cambiar a partir del ejercicio 2021 si salen adelante las propuestas de Bruselas para reformar la PAC, que introducen modificaciones en este sistemay que ya explicamos en Tempero. En sus proyectos, la Comisión Europea mantiene el mecanismo de reserva de crisis. Se constituiría en 2021 con un montante de 400 millones de euros, que se mantendría constante en los años posteriores. A diferencia de lo que ocurre en la actualidad, si no se utiliza se pasará de un año a otro sin aplicar la disciplina financiera, lo que supondrá una simplificación importante para los agricultores y las administraciones nacionales.