Por un lado, se aprueba la convocatoria temporal para campañas agrícolas y la doble tarifa eléctrica para el campo; y, por otro, se valora la salida del lobo del LESPRE al Norte del Duero.

El trabajo sindical en defensa de las personas que se dedican a la agricultura y la ganadería da sus frutos y prueba de ello es que ayer, 20 de marzo, el Congreso de los Diputados realizara dos anuncios importantísimos para el futuro del sector agrario: por un lado, la aprobación de la convocatoria temporal para campañas agrícolas y la doble tarifa eléctrica para el campo; y, por otro, el hecho de que está valorando la salida del lobo del LESPRE al Norte del Duero. Ahora se exige avanzar al Sur.

Es el resultado de meses de negociaciones, a través de ASAJA, con los distintos grupos parlamentarios, que desembocaban en la aprobación de una enmienda clave en la Ley de prevención de las pérdidas y el desperdicio alimentario. Esta modificación permite al agro realizar contratos temporales de hasta 120 días durante las campañas agrícolas, dotando así al sector de una herramienta fundamental para adaptarse con seguridad jurídica a las circunstancias cambiantes propias del campo. Hasta la fecha no se contemplaba ni la temporalidad y ni la estacionalidad del sector agrario.

La medida da respuesta directa a las demandas planteadas por las organizaciones agrarias desde la aprobación de la reforma laboral, que había dejado al sector agrario en una situación especialmente compleja respecto a la contratación temporal.

Además, la ley incluye otra victoria histórica al incorporar mejoras en materia energética largamente reivindicadas. Ahora, las personas titulares de empresas agrarias ya sean personas autónomas, empresas, cooperativas agrarias o comunidades de regantes, podrán disponer de dos potencias eléctricas diferentes durante un periodo de 12 meses. Esta flexibilidad permitirá ajustar los costes energéticos a las necesidades reales de cada explotación, facilitando la gestión mediante una simple comunicación telemática o telefónica con el suministrador eléctrico. Esta medida contribuye significativamente a la reducción de costes y aporta mayor flexibilidad operativa al sector.

En cuanto a la decisión del Congreso de la exclusión del lobo del Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial (LESPRE) al Norte del río Duero, se devuelve a las comunidades autónomas la capacidad para gestionar adecuadamente las poblaciones de lobos según sus realidades territoriales específicas. Es un reconocimiento a las demandas del sector ganadero y las dificultades económicas y sociales que esta situación genera.

Con esta decisión, las comunidades autónomas situadas al Norte del Duero recuperan su capacidad para gestionar y controlar el lobo de forma adecuada, volviendo a la situación previa a la polémica Orden Ministerial de septiembre de 2021. A través de ASAJA, se trabajará ahora activamente con las administraciones autonómicas para implementar planes de gestión eficaces y evaluar con rigor los daños causados por esta especie en las empresas ganaderas.

No obstante, ASAJA subraya que sigue pendiente la solución al Sur del Duero, donde el lobo continúa incluido en el LESPRE debido a restricciones europeas. En este sentido, la organización agraria insiste en que es imprescindible modificar la Directiva Hábitats europea para que el lobo pase de ser considerado una especie "estrictamente protegida" a únicamente "protegida". Desde ASAJA se señala que continúan trabajando activamente en Europa para lograr este cambio normativo, que permitirá extender la exclusión del lobo del LESPRE a todo el territorio nacional tan pronto como sea aprobada.

Estos logros legislativos ponen de manifiesto, una vez más, el compromiso permanente y riguroso de UAGN y ASAJA en defensa del sector agrario español.