Según datos de la Agencia de Información y Control Alimentario (AICA), la comercialización del aceite de oliva vendido en el mes de marzo alcanzaría un volumen de 136.000 toneladas, lo que representa un incremento respecto a los meses anteriores.

Dicha cantidad eleva el acumulado de los seis primeros meses de la campaña actual  2018/19 a 753.000 t. que representan un 18,2% más que en el mismo periodo del año anterior; y también una cantidad sensiblemente superior a la media de las cuatro últimas campañas.

Este buen ritmo de ventas se debe sobre todo a las exportaciones pero también a que las ventas en el mercado nacional también han crecido. Las exportaciones en esta primera mitad de la campaña  suman 485.400 t., un 24,1% más que en la campaña anterior. Y la demanda nacional alcanzaba a finales de marzo las 267.900 t., un 8,9% más que en el mismo periodo de 2017/18.

A pesar de ello y dada la buena cosecha de oliva, las existencias de aceite de oliva en marzo eran de 1,47 millones de toneladas, un 48% por encima de las existentes en la campaña anterior.

Referente a los precios es de significar una mayor estabilidad en estas últimas semanas aunque se mantienen por debajo del inicio de la campaña y las campañas anteriores; aunque en otros países productores, sobre todo Italia, las cotizaciones se sitúen muy por encima de las registradas en España.