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Este martes 13 y miércoles 14 de diciembre se ha desarrollado en Bruselas, por parte de la Dirección General de Agricultura, la Conferencia anual sobre perspectivas en el sector agrario europeo (Agricultural Outlook Conference).

Las grandes novedades políticas han sido el apoyo incondicional de Juncker a la PAC –se ha declarado “un fiel seguidor” de ella-, la confirmación de la no revisión intermedia y la apertura de consultas para establecer unas conclusiones a finales de 2017.

El presidente de la CE además definió a la PAC como una política “fundamental e indispensable” que representaba en la UE a más de 22 millones de agricultores y 44 millones de trabajadores. Es más, “la agricultura genera más puestos de trabajo que la industria de la automoción y aeronáutica juntas”. Hay que recordar que uno de los pilares básicos del plan Juncker es la defensa y la creación de puestos de trabajo.

Por lo tanto, para Juncker la PAC debería ser simplificada –aligerar la carga administrativa de los agricultores-, modernizada para acercar las posibilidades de la tecnología para producir “más con menos” y que debería también responder a los objetivos de desarrollo sostenible y a la volatilidad de los precios.

En referencia a la cadena alimentaria también ha vuelto a repetir su célebre frase donde aseguraba que “no podría aceptar que un litro de leche fuera más barato que uno de agua”, por eso recalcaba la importancia en la nueva PAC para corregir la postura de los agricultores.

El comisario de Agricultura, Hogan, por su parte se ha centrado en tres posibles objetivos que debería seguir la futura PAC. Relevo generacional, una producción más sostenible y una mayor capacidad de adaptación al mercado.

Para conseguir una mayor resilencia del mercado, Hogan, ha afirmado que la manera más elemental es seguir apostando por los pagos directos ahora y en el futuro, a la vez que se garantiza un precio justo por los productos de los agricultores.

Por otro lado, para conseguir una producción más sostenible los agricultores deberán apostar por mejores prácticas productivas, apoyo en la tecnología, innovación, etc., pero sin olvidar que esta manera de “conseguir más con menos” debería ser premiada por las instituciones a los agricultores, ha afirmado.

Y para garantizar el relevo generacional Hogan ha destacado dos variables necesarias que deberán de producirse: acceso a los créditos y a las tierras y una reducción del “papeleo”.

Por último, el comisario por el Clima y la Energía, el español Arias Cañete, ha afirmado que la CE no eliminará de forma inmediata los biocombustibles de primera generación, aunque no promoverá su uso, y que la transición hacia biocombustibles más modernos será la verdadera apuesta de Bruselas.

Cañete ha recordado también que los sistemas agrícolas europeos deberán ser sostenibles para adaptarse a los objetivos marcados por el Acuerdo por el Clima de París (COP21) y respetar así los niveles de emisión de Co2, ya que por primera vez la agricultura pasa a ser uno de los sectores que tiene obligatoriedad de cumplimento.

 

Reacciones

El COPA-COGECA ha afirmado la necesidad una PAC más simple, más común, más estable y más fuerte, que garantice un sector agrario de la UE más competitivo y orientado al mercado.

El secretario general, Pekka Pesonen, ha declarado que “el sector agrícola y forestal de la UE es vital para garantizar un suministro alimentario de calidad, así como para mantener zonas rurales atractivas y viables, el crecimiento y el empleo, y para combatir el cambio climático en el territorio comunitario. Las infraestructuras en las zonas rurales y el acceso a la banda ancha también deben mejorarse para que podamos desarrollar nuestros negocios y beneficiarnos de la agricultura inteligente y de la tecnología digital”.

“Pero para maximizar su potencial, necesitamos una PAC más fuerte en el futuro, que se centre en ser más simple, con menos burocracia para los agricultores y para las Administraciones. Debe ser estable y sostenible, con normas comunes para todos con el fin de garantizar un entorno equitativo. Los mercados cada vez más volátiles, deben afrontarse mejor para asegurar un ingreso justo, que se base en la comercialización de los productos por los agricultores”, afirmaba el representante del COPA-COGECA.

Debemos mantener, añadió Pesonen, tanto el Primer como el Segundo pilares de la PAC después de 2020, y también un buen presupuesto. Esto es importante, dado que la PAC representa menos del 1% del gasto público total de la UE, lo que representa una buena relación calidad-precio.

Por último, el secretario general ha destacado la importancia que tanto el BEI, como la EFSI, para apoyar la inversión en las explotaciones agrícolas, así como las inversiones en infraestructuras para ayudar al desarrollo de las zonas rurales y del sector agrícola.