Según las primeras estimaciones hechas públicas por el ministerio de Agricultura, la cosecha nacional de maíz alcanzará un volumen de 3´75 millones de toneladas, lo que representa una caída del 4´3% respecto a la obtenida en 2016.

El factor esencial de dicha reducción de nuestra producción de maíz se fundamenta en la reducción de la superficie de siembra a 342.030 hectáreas, un 3´2% menos que en la anterior campaña, motivado por los altos costes del cultivo y la bajada de sus cotizaciones.

A nivel comunitario, la Comisión Europea prevé un descenso del 2´8% en la cosecha de maíz que la cifra en 59´6 millones de toneladas, frente a las 61´34 t. del 2016.

Para el conjunto de todos los cereales, el Ministerio estima que la producción se situará en 15.9 millones de toneladas, frente a las 23´2 de la campaña anterior, lo que supone una reducción del 31´5%

MENOS LEGUMINOSAS

Según estas primeras estimaciones del Ministerio, la caía de las producciones de las oleaginosas también será muy fuerte debido esencialmente a la fuerte sequía registrada en amplias zonas productoras de secano.

En habas secas se prevé una producción de 55.000 t. (-8´4% menos que en 2016); en guisantes secos 187.000 t. (-37%); veza 65.000 t. (-41%); yeros 40.000 t. (-53%), a pesar de mantenerse muy similares las superficies de cultivo respecto a la anterior campaña.